Las lunas de miel, bodas de destino y turismo romántico comprenden una industria de $ 28 mil millones en todo el mundo, turismo que se inspira en lujosas oportunidades de viajes únicos, ya que comúnmente las parejas quieren hacer viajes inolvidables y esperan viajes pocos comunes, que no evoquen a una vacación normal, sino que sea especial. De allí, la importancia de saber cómo debe funcionar el Clúster Turismo de Romance.
Por ejemplo, las parejas estadounidenses gastan un promedio de $ 4.466 en su luna de miel, que es tres veces más de lo que el viajero promedio gasta en sus vacaciones. El 15% superior del mercado, los recién casados de lujo, gastan más del doble que la pareja promedio. Por ello, la industria aprovecha esta disposición para tener experiencias lujosas e inusuales para ofertar excelentes eventos y productos turísticos con destino de romance.
¿Por qué dirigirse a los recién casados?
Los recién casados están dispuestos a pagar primas por lujos y aventuras extraordinarias y son significativamente menos impulsados por los precios que el viajero promedio. El 72% de las mujeres comprometidas admitió que están mucho más preocupadas por reservar experiencias ideales en lugar de permanecer dentro de sus puntos de precio ideal.
Las bodas se llevan a cabo durante todo el año, sin limitaciones estacionales. La mayoría de las parejas toman sus lunas de miel inmediatamente después de sus bodas. Aunque la temporada alta para las bodas es de mayo a octubre, muchas parejas eligen casarse y pasar la luna de miel también fuera de temporada.
Más tiempo de viaje que los viajeros ordinarios
La duración promedio de una luna de miel es de 8 días (11 días para el segmento de lujo), en comparación con el viajero promedio que pasa menos de una semana de vacaciones. Como los recién casados se están adaptando a su nueva vida juntos y tienen más ingresos disponibles, también tienden a comprar más de lo normal mientras están de vacaciones.
¿Qué buscan las parejas en un destino de luna de miel o boda?
Mientras que la mayoría de la demanda todavía se enfoca en vacaciones de lujo basadas en la playa, relajantes, están surgiendo segmentos de luna de miel más nuevos. Algunas parejas buscan lunas de miel para viajes de aventura, lunas de miel abreviadas debido a compromisos de trabajo extenuantes, “estancias familiares” en las que los niños de matrimonios anteriores acompañan a la pareja y viajes de voluntariado.
Las parejas quieren celebrar su matrimonio con experiencias únicas en la vida. Los destinos deben ofrecer experiencias de viaje auténticas que se basen en la cultura local y que a la vez satisfagan el deseo de lujo de los recién casados.
Las lunas de miel de dos paradas permiten que las parejas experimenten más de un tipo de vacaciones, y son ideales para parejas cuyas preferencias difieren de las de sus parejas.
¿Cómo deberían promocionarse los destinos como destinos para bodas y lunas de miel?
Para atraer a los recién casados, los destinos deben comprender e interactuar con su público objetivo. Los sitios web deben incluir secciones dedicadas exclusivamente a viajes románticos, lunas de miel y bodas de destino. Estas páginas deberían, por supuesto, ser amigables para el SEO, incluidas las palabras clave que los recién casados probablemente buscarían al investigar su destino. El contenido web debe proporcionar ambas imágenes para inspirar a las parejas, así como información útil para planificar y reservar sus experiencias ideales.
La presencia en medios específicos de la industria puede mejorar enormemente la visibilidad de los destinos. La industria de la boda publica revistas, mantiene sitios web y presenta exposiciones para parejas comprometidas. Una vez que, una pareja conoce su destino o sabe qué buscar, los sitios web de destino serán su principal fuente de información.
Al proporcionar información directamente relacionada con sus factores clave de decisión, incluidos el clima, la gastronomía, los tipos de alojamiento, las actividades, el paisaje natural y las consideraciones presupuestarias, aumentará drásticamente la posibilidad de reservar, la actividad de boca en boca generada y el tráfico a un destino.
