El último informe del FMI, “Perspectivas Económicas Regionales”, debió activar las alarmas de los sectores productivos latinoamericanos. En el documento destaca el artículo “Impacto en América Latina de caídas del crecimiento en China y Estados Unidos”.En éste se describe cómo la reducción de las importaciones de materias primas por parte de ambas potencias, afecta la economía de nuestros países.
China y Estados Unidos absorben la tercera parte de la producción mundial de petróleo y más del 50% de metales. El proyectado decrecimiento de estas economías previstas por el FMI para el año 2020 reduciría los precios de las materias primas. En consecuencia, se perjudicaría primeramente a los exportadores netos de materias primas como Ecuador.
Entre las exportaciones de materias primas de la región resaltan: el café de Brasil, Colombia y América Central, el cobre de Chile y Perú, así como el hierro de Brasil. Por otro lado, Argentina, Brasil y Uruguay exportan soja. Entre tanto, Bolivia, Colombia, México, Trinidad –Tobago, Venezuela y Ecuador exportan petróleo y gas.
Los efectos del decrecimiento de China y EU en la economía de Ecuador
Se advierte que los países más impactados por la baja en los precios de las materias primas serán Venezuela, Bolivia, Trinidad y Tobago, Chile y Ecuador. Esto se debe a que estos son exportadores de petróleo y gas principalmente. Por lo que se recomienda mejorar la resiliencia económica, mediante la diversificación de las exportaciones.
Asimismo, se sugiere fortalecer las asociaciones comerciales y aprovechar las oportunidades derivadas del re equilibrio de la economía china. Este hecho generará un incremento en su demanda de bienes de consumo y servicios. Las empresas manufactureras ecuatorianas podrían verse beneficiadas.
Dos de las áreas productivas ecuatorianas mejor aspectadas para aprovechar la mencionada coyuntura es la siderúrgica y metalmecánica. Aun cuando su comportamiento ha sido fluctuante, el sector ha mantenido su estabilidad. La persistencia de los empresarios privados ha sido vital para garantizar el crecimiento sectorial.
Una industria que favorece la diversificación de las exportaciones
La industria metalmecánica es uno de los motores neurálgicos del crecimiento económico de cualquier país. La generación de empleos para personas con mejores niveles educativos, asegura la preservación de esta actividad. Actualmente el sector metal mecánico impacta directamente a más del 11% de la industria ecuatoriana.
Además de materia prima, nuestro país produce desde metálicos básicos, maquinarias eléctricas y no eléctricas hasta piezas para carrocería. Por consiguiente, la producción de bienes con incrementos del valor agregado se ha convertido en clave para dinamizar otros subsectores de la economía. Como resultado se potencian las posibilidades de diversificación de las exportaciones.
Otros productos manufacturados por el subsector metalmecánico ecuatoriano son: cubiertas y sistemas metálicos, tuberías, perfiles estructurales y laminados, invernaderos viales, varillas de construcción y alcantarillas. También, insumos para la fabricación de maquinarias y equipos para los sectores: petrolero, eléctrico y de la agroindustria.
Nuevas oportunidades para el desarrollo del sector metalmecánico
El sector metal mecánico ecuatoriano está conformado en su mayoría por pequeñas y medianas empresas. La excelente calidad y competitividad del producto ecuatoriano ha permitido competir en el mercado regional y exportar más de $ 500 millones. Los cinco países a los cuales se exportan productos metal mecánicos ecuatorianos son: Venezuela, Colombia, Perú, China y Estados Unidos.
De hecho, la exportación de materias primas a precios moderados y/o de productos elaborados son estrategias resilientes tradicionalmente asumidas por nuestra industria. La astucia del empresario ecuatoriano le ha permitido crecerse ante las dificultades. Sin embargo, se requiere la alianza de los sectores público y privado para aprovechar las oportunidades que tiene este importante sector de la economía nacional para consolidarse.
